Muchos de nosotros llegamos al BDSM luego de pasar un tiempo buscando
y sin saber cómo entrar, sobre todo los que tenemos más de cuarenta. Sabíamos
qué queríamos, sabíamos qué buscábamos aún antes que se hiciera popular Internet,
chats, grupos, foros, blogs y redes sociales.
Necesitamos informarnos y aprender. Nadie sabe todo, menos aún la gente nueva, la indecisa, la que está buscando su camino; esa es la que más debiera ocuparse por saber. ¿Por qué? Porque si decide ser Dominante debería tener conocimiento de su rol, debería saber la responsabilidad que conlleva, debería conocer cosas básicas como dónde azotar, qué tipo de vela usar, o cómo contener al dominado. Y si es sumiso debería tener información para, antes que nada, asumir la responsabilidad de cuidarse a sí mismo, porque si tiene pasta de sumiso, el Amo se encargará de educarlo en la sumisión para convertirlo en lo que Él desea.
Hay mucha gente, sobre todo en Facebook, que sabe que le gusta el BDSM
pero desconoce su rol, y está muy perdido. Creo que antes de buscar un
compañero de juego debería saber, debería tener claro quién es, qué es y cuál
es su rol. No para encasillarse, sino para disfrutar con la seguridad de que
está haciendo lo que le gusta en el rol acertado y en el lugar que le
corresponde.
anitaK[SW]
Algunos tenemos claro nuestro rol desde niños, lo confirmamos en la
adolescencia o de mayores. Otros llegan aquí sabiendo que esto es lo que les
gusta, lo que buscan, se identifican con lo que ven, pero terminan
preguntándose “¿cuál será mi lugar?”.
Puede pasar que a esta gente indecisa no los ayude la edad porque
todavía están estudiando, o quizás viendo qué van estudiar. La adolescencia y
la juventud es un período donde tomamos decisiones que quizás nos pesen el
resto de la vida; hay decisiones que parecen las adecuadas para el momento,
pero con el tiempo nos damos cuenta que no fueron las más acertadas; hay unas
decisiones que resultan erróneas y otras no. Entonces… ¿qué hacer?
Creo que deberíamos seguir la táctica de los científicos en sus
laboratorios: ensayo y error. Prueban, experimentan, se equivocan, vuelven a
empezar… hasta dar con la fórmula que buscan. Para eso no es necesario tener
experiencias reales; lo que me parece básico e imprescindible es … la
información.
Necesitamos informarnos y aprender. Nadie sabe todo, menos aún la gente nueva, la indecisa, la que está buscando su camino; esa es la que más debiera ocuparse por saber. ¿Por qué? Porque si decide ser Dominante debería tener conocimiento de su rol, debería saber la responsabilidad que conlleva, debería conocer cosas básicas como dónde azotar, qué tipo de vela usar, o cómo contener al dominado. Y si es sumiso debería tener información para, antes que nada, asumir la responsabilidad de cuidarse a sí mismo, porque si tiene pasta de sumiso, el Amo se encargará de educarlo en la sumisión para convertirlo en lo que Él desea.
Así que confrontando las actitudes que se esperan para un Dominante
(ya sea Amo, Señor, Dueño, Spanker), para un sumiso (o esclavo) y para un
spankee, será más fácil identificarse con el rol que nos identifique, con el
que nos sintamos cómodos.
Hay Amos que piensan que ser Spanker es azotar a la spankee, y no es
así. En el Spanking clásico son muy importantes el juego de roles, la actitud
de cada rol, el vestuario, el juego anterior a la azotaina y también el
posterior. Y una esclava está en las antípodas de una spankee, y la sumisa
tampoco se parece a la spankee. Las dos primeras solo buscan agradar al
Dominante, y la spankee busca hacerlo enojar, desobedecerlo y mostrarle su
rebeldía, algo que la sumisa o la esclava jamás haría.
Por supuesto que este es mi punto de vista, y me encantaría que me
dijeran su opinión.
Saludos para todos. Estoy feliz de regresar a escribir en este blog.
anitaK[SW]